La importancia de la personalización del diseño en los photocalls

 

Hace unas semanas fui a un evento con un grupo de gente. El sitio estaba lleno de grupos pululando y viéndolo todo.

Uno de los puntos focales era un photocall apto para hacer fotografías de grupo. No hace falta decir que era una de las estrellas del show. La gente hacía cola para posar y hacerse la foto.

He visto photocalls parecidos en otros eventos y el efecto no era el mismo, en absoluto. ¿Por qué? Básicamente porque el diseño era aburrido, predecible, corporativo.

La gracia del photocall es que te lleves a casa un recuerdo – del evento, de la gente con quien has ido o de los dos. Tiene que servir para enmarcar un recuerdo.

Si lo importante es el evento, el photocall debe decir algo acerca de la persona que posa. Debe querer asociarse con esa imagen.

Si lo importante son las personas, el photocall debe destacar el grupo: ser divertido, novedoso, llamar la atención.

Mejor si lo puede hacer todo a la vez.

Cómo hacer un buen photocall

Todo esto me lleva a hacer una reflexión sobre las razones para hacer un photocall y cómo hacerlo bien.

Si quieres saber cómo es técnicamente un photocall y ver ejemplos guapos, puedes ver varios en esta tienda online de photocalls.

¿Para qué te sirve un photocall?

1. Para llamar la atención en tu evento

Un photocall es un elemento de atracción natural. Cada vez que un visitante se hace una foto está posando unos instantes – tiempo suficiente para que otras personas lo vean y quieran hacer lo mismo. Es fácil que se forme una cola para sacarse fotos.

2. Para generar un momento «wow»

Hacerse una foto sonriendo, haciendo el ganso o posando con un anfitrión es un momento álgido, tanto en el momento como en el recuerdo.

3. Para que los visitantes se lleven un bonito recuerdo

Una experiencia vive en el recuerdo. Una fotografía además vive en el álbum de fotos, en el feed de Instagram y en el Whatsapp de los amigos.

4. Y para que recuerden tu marca

Siempre que vean esa foto verán tu marca y recordarán tu evento. Además la asociarán con un gran momento – eso es algo que definitivamente quieres para tu marca.

Ahora, ¿cómo haces un buen photocall?

Lo primero es que sea personalizado – no basta con poner el logo detrás, salvo que hacerse fotos sea lo que se espera de los invitados. Los photocalls aburridos llenos de marcas que salen en la tele tienen ese diseño precisamente porque van a salir en la tele.

Lo siguiente es decidir cuál va a ser el interés del photocall, por qué van a hacerse esa foto.

• ¿Habrá un anfitrión para aparecer en las fotos?
• ¿Es un evento que van a querer recordar?
• ¿La gente irá sola, en pareja o en grupo?
• ¿Habrá niños?

Finalmente, según las respuestas hay que hacer un diseño que sea atractivo, quizás divertido y que muestre bien la marca.

Y si ves que vas a tener dos públicos diferentes, ¿por qué no diseñar dos photocalls?

En resumen

Un photocall bien diseñado es una opción excelente para crear un punto de atracción en tu evento y un gran recuerdo posterior.